Hacer pompas de chicle puede ser difícil, sobre todo si estás usando el tipo incorrecto de chicle. ¿Quieres saber qué tipo de chicle necesitas para crear las mejores pompas?
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Los mejores chicles para hacer pompas
Después de semanas de investigación (y de mascar chicle) he recopilado una lista de los mejores chicles para hacer pompas.
Dubble Bubble
Dubble Bubble es el chicle de pompas original, ¡así que tiene su lugar asegurado en esta lista! En 1928, Walter Diemer consiguió producir una goma de mascar menos pegajosa mientras experimentaba con nuevas recetas. Tras probarla, descubrió que podía hacer pompas con facilidad, creando así el primer chicle de pompas. De hecho, el poseedor del récord de pompas de chicle usó tres trozos de Dubble Bubble para su hazaña. Quién sabe, a lo mejor puedes llegar a batir este récord.
Hubba Bubba Bubble Tape
En cada envase de Hubba Bubba Bubble Tape podrás encontrar una tira de casi dos metros de chicle. Por lo tanto, es la opción perfecta si buscas los mejores chicles para hacer pompas y tienes que practicar durante horas hasta lograr la pompa perfecta.
Bubbaloo
Bubbaloo es uno de los mejores chicles para hacer pompas realmente grandes. Blando y gomoso, la gente lleva muchos años desafiando a sus amigos en torneos de pompas usando este chicle. Es conocido por su consistencia blanda, su forma redondeada y su delicioso relleno líquido. No sólo tiene un sabor increíble, sino que también es fantástico para hacer pompas. Eso sí, asegúrate de disfrutar primero de su sabor.
Bubblicious
Es imposible no incluir Bubblicious en una lista de los mejores chicles para hacer pompas. Sus trozos envasados individualmente y llenos de sabor son perfectos para torneos de pompas. De hecho, ¿sabías que Bubblicious tiene el récord del mundo de la mayor cantidad de pompas de chicle hechas al mismo tiempo? Para lograr este récord hicieron falta más de 300 trozos de chicle y más de un centenar de participantes.
Tipos de chicles
Recuerda que lo primero a lo que debes prestar atención es a si se trata de chicle de pompas o de goma de mascar. Como sus nombres sugieren, la goma de mascar está hecha para ser mascada y el chicle de pompas está pensado para hacer pompas. Aunque los dos se pueden usar para ambas cosas (el chicle de pompas se puede usar principalmente para mascar y la goma de mascar para hacer pompas), cada uno está especializado en una de ellas.
Chicle de pompas
El chicle de pompas fue inventado de forma accidental en 1928 por Walter Diemer. Estaba experimentando con nuevas recetas de chicles hasta que encontró una que era menos pegajosa y que se estiraba con más facilidad que la goma de mascar normal. Estas propiedades también conseguían que se pudieran hacer pompas de manera más sencilla.
Además, cuando la pompa explotaba, el chicle no se acababa pegando a la cara o a otras partes del cuerpo. Este chicle tenía estas propiedades debido a la incorporación de varios ingredientes adicionales, incluyendo almidones.
Este tipo de chicle se elabora con más goma, por lo que es más resistente y se puede estirar sin que se rompa. Además de esto, los mejores chicles para hacer pompas suelen perder antes su sabor, ya que esto consigue que las pompas sean más resistentes y puedan alcanzar un mayor tamaño.
Normalmente, estos chicles se venden con diseños divertidos y a la moda. Por lo tanto, suelen tener colores llamativos con sabores afrutados como la fresa, el arándano, la sandía, la uva, etc.
Goma de mascar
Por otro lado, la goma de mascar suele ser menos elástica y más pegajosa que el chicle de pompas. Aunque existen desde hace más de 6.000 años, la primera goma de mascar moderna fue fabricada y vendida por John B. Curtis en 1848. La llamó “Goma de Pícea Pura del Estado de Maine” (“State of Maine Pure Spruce Gum”). Como su nombre sugiere, esta goma estaba hecha a partir de la resina segregada por las píceas.
Las gomas de mascar se suelen publicitar como beneficiosas para los dientes, para ejercitar los músculos de la mandíbula y para mejorar el aliento. Debido a su popularidad para refrescar la boca, normalmente están disponibles con sabores mentolados. Sin embargo, no son la opción más adecuada si buscas los mejores chicles para hacer pompas.
Cómo hacer las mejores pompas de chicle
Para hacer pompas de chicle es necesario tener en cuenta varios factores, y también existen algunos trucos que deberías seguir para conseguir unos resultados espectaculares. Así que si sigues estos consejos y usas los mejores chicles para hacer pompas, no tardarás mucho en conseguir hacer unas pompas fantásticas.
No uses demasiado chicle
En primer lugar, no debes meterte demasiado chicle en la boca. Tardarás mucho más en conseguir que sea tan maleable como se necesita, y además puede provocar que sea más difícil hacer pompas. De hecho, el actual poseedor del récord del mundo sólo usó tres trozos de chicle.
No te preocupes por el sabor
El segundo aspecto que debes tener en cuenta es que el sabor no importa. De hecho, debes mascar el chicle durante el tiempo suficiente como para eliminar el azúcar y el sabor, ya que así la pompa será más resistente. ¡Puede llevarte unos cinco minutos! De hecho, en las competiciones se deja que los participantes preparen el chicle durante media hora.
Posición de la lengua
En tercer lugar, cuando tengas el chicle listo debes usar la lengua para hacer un agujero en el chicle y luego soplar para hacer una especie de bolsa. Éste será el inicio de la pompa. Además, tendrás que mantener la boca relajada y soplar lentamente respirando de manera uniforme. Si soplas con demasiada fuerza o rapidez, ¡acabarás reventando la pompa!
Entorno
Por último, además de elegir los mejores chicles para hacer pompas, también debes tener en cuenta la temperatura y las condiciones del aire. Si el chicle está demasiado frío será menos maleable, lo que complicará la tarea de soplar. Sin embargo, si está demasiado caliente la pompa acabará cayéndose. Si estás al aire libre, asegúrate de que te proteges del viento, o en caso contrario te arriesgarás a que la pompa se te pegue por toda la cara.